No queremos que nos cataloguen de machistas, ni de básicos ni nada por el estilo, pero si me dicen que la Domi sólo fue a vitrinear a China y no se compró o tentó con nada, mejor que me soplen este ojo...
Imaginamos, sin ningún tipo de alucinógeno en el cuerpo, ni pidiéndole ayuda los capos del programa Psíquicos, que la marca cuernofónica que se rajó con el manso viaje para los primeros finalistas del reality, además se puso con algún billete para que la Domi y Roca compraran algún recuerdo del paseo que les cambiará la vida.
Según nuestro corresponsal en las tierras donde está permitido tirarse un ope y su respectivo eructo tras servirse alguna cosita, el señor Tai Ma Won, los cabros no pueden creer lo alucinante que es Shangai y sus alrededores.
Por lo que logramos descifrar del despacho de nuestro colega cargado a la soya y al arrollado de mariscos -me van a creer que el muy vivo lo mandó escrito en un grano de arroz- los brocas pusieron una patita en la losa del aeropuerto y se quedaron pegados de ver tanta gente con los ojitos lakaos.
Al toque se fueron al hotel para con el plumón que les regalamos antes de que se mandaran a cambiar, recuperar la forma original de sus retaguardias. Se dieron una tina con agua tibia y estuvieron a punto de pedir unos masajes a unas chinitas que estaban en el lugar, cuyas manos estaban listitas para hacerlos sonar en su habitaciones.
Pa’ malacue de ellos, se hizo presente el satánico doctor Nakalapirinaka y de una los mandó a la calle para que empezaran a hacer de las suyas y así juntar el material que con tantas ganas esperan los incondicionales de la mula realidad.
PASEO Y MATUTE
A todo esto por fin lograron establecer comunicación con los muy despistados y según nos soplaron en una fuente de soda cercana a la red cruzada, las primeras imágenes registradas donde el remolino del guáter gira para la derecha, verían la luz el lunes o martes de la próxima semana.
Y por lo que nos cuenta Tai Ma Won, en esas imágenes podremos verlos súper engrupidos con la cultura y como poniendo atención a unos guías turísticos... Y ellos no entendiendo ni jota. Otra cosa será cuando se arrimen a la mítica Muralla China, donde Roca se anduvo hasta emocionando.
Y como no podía faltar el chistosismo en esta historieta, ni se imaginan cómo andaba la Domi con tanta bisutería y alhajas que hay por esos lares. Gatos que saludan y traen suerte, aros, tecnología, figuras chinas, té verde, etc... Se volvió loca con los precios. Es que los chinos son capaces de copiar hasta los estornudos y re barato.
Como buena matutera, a la morenaza se le prendió la ampolleta y de una pensó en hacer negocio: comprar harto y barato allá y vender caro acá, ¿qué tal? Ni le cuento cómo puso los ojitos cuando conoció el mall de la copia que se incrusta por allato. Pensó que iba a encontrar al clon de Joche.
INFORME: La Cuarta
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